A toda máquina sobre el camino de acero

FECOSA

Jamás se adivinaría que debajo de ese montón de tierra, aparentemente lanzada por urbanizadores del sector, se escondía la línea férrea.

Pasamos este puente de piedra sobre el río Puruses. Aún debajo de la cubierta verde, se nota que se encuentra en excelente estado a pesar de sus años.

Ahora es el paso a nivel sobre la calle a Eucalipto. En este sector, el derecho de vía se mantiene limpio, pues incluso algunos vecinos la usan como calle para entrar a su casas y cocheras.

Por supuesto que con la limpieza, se ve mejor que el respeto al derecho de vía. Más adelante si notaremos algunas invasiones a la propiedad del ferrocarril.

Llegando a un pequeño parque, junto a la calle que conduce a Concepción de la Unión, el cambio es radical. La naturaleza había tomado la vía y hacía que el parque fuera más grande.

Debajo de todo esto, se ocultaba el apartadero de Rohormoser. Aún estaban el cambio de vías y los rieles intactos.

Este es el final del apartadero. Antes, hasta había una pequeña cerca que limitaba el paso y que muy probablemente fue colocada por alguien que quiso hacer suya esta franja de terreno.

Unos pasos más adelante, algún vecino quiso ampliar la entrada a su propiedad y levantó los rieles. Pero por lo menos, no se los llevaron.

La limpieza continúa aunque en este sector no hay tanta maleza pero si mucha tierra que cubre los rieles. Pero quizás si estuvieran al descubierto, ya se los habrían robado.

Aquí antes había un montículo de tierra y algo de zacate. Así que poco a poco se limpia el sector para el pronto paso de la maquinaria que reconstruirá la vía.

Estamos llegando al sector de Cipreses. Aquí tampoco la vía ha cambiado mucho.